CAPITULO 3. LA MAGIA DE ESCRIBIR


TERCER PASO PARA ESCRIBIR UN LIBRO



Hola queridos lectores, bienvenidos una vez más a este pequeño espacio donde hablamos de escritura y literatura. 
El día de hoy toca el tema de hablar sobre el tercer paso para escribir un libro. Ya vimos que primero ocupas la idea principal y de cómo acabará tu historia, luego la segunda parte que es saber qué tipo de escritor crees que eres (obviamente esto ya lo pusiste en práctica, recomendación que señale en ese artículo) y ¿ahora será momento de escribir?
La respuesta es NO.

Sé que no hay más pasos antes de esto, pero el escribir con lleva sub-temas o sub-pasos que precisamente aquí hablare de ellos, pero todo esto hay que llevarlo con calma.
Por supuesto que ya estamos impacientes por comenzar a escribir pero si comenzamos así de la nada, será muy complicado y lo digo, porque ya pase por ello y solo terminaremos estancados.

Ya sea que somos tipo brújula, mapa o híbrido, debemos tener en cuenta algunos puntos que son importantes tener en cuenta antes de escribir, y es lo siguiente.

  • ¿Qué tipo de narrador habrá?
  • Tiempos y esquemas
  • Escenas
  • Personajes
  • Mundos y Mapas
  • Disponibilidad y metas
  • Trabajar en el inicio y final
  • Escaletas (necesario para los que son mapas o híbridos)
  • Leer mucho
  • Visión board (necesario para los que son mapas o híbridos pero pueden usarlo los de brújula)
  • ¿Inspiración?
  • Emociones a través de la escritura
  • Errores típicos
  • Sinopsis


Como verán, son varios elementos que hay que tener desde el principio para comenzar a escribir. Por lo que hoy trataremos de decidir qué tipo de narrador es mejor en nuestra historia.
Es una de las principales dudas que surgen a la hora de escribir un libro o un relato, con el fin de publicar un libro. A través del narrador conocemos datos, personajes, escenarios, opiniones, emociones… Pero siempre desde un punto de vista, una perspectiva y un tono en concreto. Por ello, debemos tener en cuenta lo que queremos contar, cómo nos gustaría hacerlo y cuál es nuestro objetivo. Es decir, el efecto que queremos generar en el lector. Así también lograremos que el lector se enganche página tras página.

#1 Tipo de narrador protagonista

Descrito en primera persona y también conocido como «narrador personaje», es fácil de identificar porque la voz que cuenta la historia es el personaje principal y se sitúa en el centro de la acción. La principal característica reside en que, al formar parte de la historia, su punto de vista sobre los hechos es limitado y subjetivo. Este tipo de narrador aporta credibilidad, ya que permite que el lector lo perciba como alguien real y cercano, alguien que le habla directamente y con el que camina de la mano a través de los acontecimientos.
Un ejemplo de este tipo de narrador, lo encontramos en la saga de Outlander, escrita por Diana Gabaldon.

#2 Narrador en segunda persona

Aunque, dentro de la clasificación de los distintos tipos de textos o tipos de narrador, este haya caído prácticamente en el olvido. Si lo que quieres es hacer partícipe de la historia al lector y convertirlo en protagonista, este es el tipo de narrador idóneo. Ahora bien, para trasladar a tu público hasta ese punto, es de suma importancia describir los hechos, los lugares y las atmósferas a la perfección, así como adelantarte a sus posibles reacciones y saber qué sentimientos vas a despertar en él. El lector tiene que crear ese mundo en su mente como si fuera real. Emplea el tiempo presente para captar su atención y que experimente lo que se está narrando, como si fuera un actor que se dispone a interpretar una obra.
Este narrador quizá sea el más difícil de construir, puesto que, si no se hace con extremo cuidado, puede confundir al lector.
Ejemplos: El gran Gatsby, de Scott Fitzgerald; Aura, de Carlos Fuentes; Querido John, Nicholas Sparks.

#3 Narrador testigo

Como su nombre indica, el que cuenta la historia es un testigo que nos narra los hechos en primera o tercera persona. No se trata del protagonista, sino de un personaje que ha presenciado lo ocurrido y nos lo relata desde un punto de vista concreto, limitado, con pocas o ninguna referencia a sí mismo. Como máximo, puede facilitarnos su punto de vista, pero no hace juicios de valor. Es un narrador-observador que puede integrarse en la acción u presenciarla desde fuera para contar los hechos de una manera más o menos objetiva, atendiendo a lo que el presenció.
Ejemplos del narrador testigo son: La colmena, de Camilo José Cela; las novelas de Sherlock Holmes, en las que Watson nos narra las peripecias del inmortal detective; o El capitán Alatriste, de Arturo Pérez Reverte.


#4 El narrador en tercera persona

El narrador en tercera persona es aquel que cuenta la historia desde fuera. Este narrador es alguien ajeno a la acción que cuenta lo que les sucede a los personajes. Conoce a los personajes, de hecho pude conocerlos de forma muy íntima y dar cuenta de sus más recónditos pensamientos; pero eso no significa que el narrador en tercera persona haya formado parte de la acción, como tampoco es uno de los personajes. Puede ser un narrador omnisciente, es decir, un narrador que sabe absolutamente todo lo acontecido. Por eso se suele equiparar al narrador en tercera persona omnisciente con dios: un ser que lo ve todo, lo conoce todo y todo lo consigna.
Puede ser un narrador cuasi omnisciente. Este narrador ha renunciado a su «divinidad» y tiene ciertos límites a la hora de contar su historia. Puede acompañar a los personajes allá donde ellos estén (cosa que no siempre puede hacer, por ejemplo, un narrador en primera), pero no penetra en sus mentes ni dispone de explicaciones para cada acontecimiento, como sí lo hace el narrador omnisciente.

                 Ventajas de usar este tipo:

  • Hacer algo distinto: ya que en primera persona pierde estilo y esta encasillado.
  • Mayor profundidad: no está limitado.
  • Más sencillez: si eliges un narrador omnisciente, es realmente fácil. No en vano es un narrador que viene usándose desde hace siglos en la literatura.
  • Causa-efecto: Las buenas historias están basadas en la relación causa-efecto. Sucede una cosa y, como consecuencia, sucede otra… y así hasta el desenlace.
  • Mayor objetividad: El narrador describe la acción, la historia, desde fuera. No está implicado en la misma, como sí lo está el narrador en primera, y por eso se le supone una mayor ecuanimidad para presentar no solo los actos, sino también a los actores.
  • Puedes expresar pensamientos  de todos los personajes: Narrando con una voz en tercera persona, también es posible expresar, no solo acciones, sino sentimientos o pensamientos que los personajes se guardan para sí mismos.


A mi punto de vista, los más utilizados son en primera  y tercera persona, por  algunos de los libros que he leído. También debe de considerar que si vas iniciando con la escritura, lo más conveniente es escribir en primera persona, pero no hay reglas en la escritura.

NO OLVIDES…

Después de este repaso por la tipología de los narradores, ya puedes empezar a armar y organizar tu novela. Pero antes, unos últimos consejos:              
  • Sopesa las diferentes opciones de narrador, pues, dependiendo de cuál elijas, tendrás que utilizar un tiempo u otro. Por ejemplo, si vas a narrar tu historia en primera persona, siempre es mejor escribir en pasado. El uso del presente puede resultar antinatural, forzado, por lo que podríamos confundir al lector.
  • Decide si te conviene atar la visión del lector a la de un único personaje o si tu historia necesita ser contada de manera más objetiva.
  • No confundas al autor, a ti mismo, con el narrador. El primero es el creador y escritor de la historia, y se encarga de organizar y seleccionar todos los elementos que intervienen en ella, entre ellos, el propio narrador. Este, por su parte, es un ser ficticio creado por el autor, una voz a través de la cual puede contar, juzgar y opinar sin que por ello la historia pierda credibilidad.
  • La elección de una u otra voz es esencial para que una obra consiga funcionar o no logre despegar.
  • Cualquier tipo de narrador tendrá sus ventajas y desventajas, por lo que si aún tiene dudas de su empleo, déjamelo en comentario o ve tutoriales.


Por el momento es todo, hasta el siguiente viernes con el tema de usos de tiempos y esquemas.

Saludos.❤✌😘

 Instagram Oficial:  @letrasdejessa




Comentarios

Entradas populares